Un robot destinado a limpiar los desperdicios de un mundo decadente se queda solo en la tierra después de 700 años de servicio. Sin una compañía similar capaz de reconocer su existencia, nuestro mecánico amigo se deja llevar por las emociones en vez de por la locura en su triste existencia.
Reconozco la historia de Wall-E en esa descripción, es un ejemplo muy acertado para un sentimiento mas bien humano.
Su vida se desarrolla aglomerando desperdicios pero entre estos encuentra cosas que le sorprenden, es muy sensible al mundo inerte que le rodea dado que después de todo, es lo único que tiene. En su pequeño santuario de cosas maravillosas tiene almacenado todo lo que le ha parecido digno de ser recordado, un lugar mágico.
No sobre actua ni finge, su soledad ha elevado de sobre manera su sensibilidad. Es quizás como la vista, cuanta menos luz ilumina nuestro entorno, nuestros ojos se haces mas sensibles y podemos ver. La falta de otras entidades que lo critiquen y coarten le ha llevado por el camino de expresar mucho más sus emociones.
Wall-E esta hueco, vacío, y llena con "basura" la soledad de su interminable vida. Esto sucede constantemente en la sociedad actual, con núcleos urbanos habitados por millones de humanos... Cierto que vivimos con mas personas, pero nos sentimos mas solos, y llenamos con catalogos de revistas nuestra depresión. Wall-E lejos de rendirse ante su aplastante realidad, decide construir su propio mundo. No deja de tener esperanzas, en su interior desea encontrar el mundo que lo ha abandonado, y llenarse con el.
No se enfada por su situación, ni se deprime. No se desespera, sino se carga de ilusión y ganas de lograr encontrar otra entidad con la pueda relacionarse.
Para poder sobrevivir tal abismo Wall-E demuestra una entereza que pocos humanos tienen. Para ayudarse se plantea una vida con ocupaciones, se pone retos personales, le da continuidad a su existencia...
Hay que creer en Wall-E, hay que ser más sensible a cuanto nos rodea, y sobre todo a las personas cercanas. Debes valorar las emociones que habitan en las criaturas vivas, sobre todo en las personas, por encima de cualquier articulo de revista que te da la sensasión de llenarte, pero no lo hace en realidad.
Como dice el refrán: las cosas importantes no son cosas
Pixar Animation Studios
PD: Cuando aparece Eve, ya es otra historia... :-)
